¿Qué sucede en tu cuerpo durante y después del sexo?

Después del sexo, algunos se recuestan contra el cabecero de la cama, orgullosos de su “logro”, y encienden un cigarrillo. “¿Cómo estuvo para ti?” te preguntas, mientras tomas una merecida calada. Otros simplemente se dan la vuelta, dejando a su compañero frustrado y sin ganas de dormir. Pero, ¿qué pasa realmente con nuestro cuerpo durante y después del sexo? En este artículo, exploraremos los cambios físicos y emocionales que hombres y mujeres experimentan, y desentrañaremos lo que la ciencia tiene que decir al respecto.

Los Cambios Fisiológicos en los Hombres

Durante el sexo, los hombres alcanzan un punto de no retorno, conocido como “inevitabilidad eyaculatoria”. El ritmo cardíaco y la presión arterial aumentan, el esperma es expulsado, y el pene experimenta contracciones. Después del orgasmo, el cuerpo del hombre se relaja rápidamente, con el pene volviendo a su estado flácido. Sin embargo, la recuperación depende de factores como la edad, el estado físico y el deseo de volver al “fuego de la pasión”.

Es natural que después del sexo, muchos hombres sientan la necesidad de dormir. La ciencia respalda esto: durante el orgasmo, el cerebro masculino libera una cascada de químicos como serotonina, oxitocina y prolactina, que inducen la relajación y el sueño. La prolactina, en particular, es la principal responsable de esa sensación de satisfacción que lleva a muchos hombres a roncar minutos después.

Lo Que Sucede en las Mujeres

En las mujeres, el orgasmo no siempre es una garantía. Según estudios citados en Psychology Today, aproximadamente el 50% de las mujeres alcanza el orgasmo regularmente durante el sexo, mientras que un 20% raramente lo experimenta. Cuando ocurre, el orgasmo femenino es un evento de contracciones rápidas y rítmicas que envían ondas de placer a través de los genitales, el útero y la pelvis. Este proceso también libera una mezcla de químicos que, al igual que en los hombres, induce una sensación de bienestar y relajación.

Sin embargo, a diferencia de los hombres, las mujeres no experimentan un período refractario, lo que significa que pueden estar listas para otra ronda casi de inmediato. Pero hay que tener cuidado, ya que el sexo prolongado puede causar molestias en el útero o sequedad vaginal, lo que puede hacer que la experiencia sea dolorosa.

Diferencias Post-Coitales Entre Hombres y Mujeres

Una diferencia notable entre hombres y mujeres después del sexo es la inclinación a conversar. Mientras algunos hombres están listos para dormir, las mujeres, gracias a una liberación adicional de oxitocina, conocida como la “hormona del abrazo”, pueden sentir el impulso de hablar sobre temas profundos o incluso planear el día siguiente.

Las mujeres también experimentan cambios físicos visibles, como el aumento del tamaño de los senos hasta un 25% y una mayor sensibilidad en los pezones y el clítoris. A veces, estos cambios son tan pronunciados que algunas mujeres se sienten más atractivas y seguras de sí mismas después del sexo.

Conclusión

El sexo afecta a hombres y mujeres de formas complejas, tanto física como emocionalmente. Aunque los hombres tienden a experimentar un “bajón” más pronunciado después del sexo, ambos géneros pasan por cambios significativos que van desde el simple cansancio hasta alteraciones en la percepción de sí mismos. Pero, como dice el dicho, “lo que sube, debe bajar”, y casi siempre vale la pena disfrutar del viaje.