Las 6 Habilidades Que Todo Hombre Debe Dominar

En el mundo moderno las cosas siempre están cambiando pero hay cosas que nunca cambian aquí está la realidad: un hombre debe ser capaz de controlarse a sí mismo sin importar cuál sea la situación y hay habilidades que todo hombre necesita dominar sin importar en qué época viva. Estas son las habilidades que todo hombre debe tener.

1. Saber Pelear

No importa si eres un hombre de negocios, un médico o un comediante, si no sabes pelear te falta masculinidad. Entrar en peleas o peleas callejeras es algo que todos debemos evitar, pero todos deberíamos saber defendernos. Repasemos una situación que te podría pasar a ti un día: estás caminando por la calle con tu esposa y un tipo pasa y le da una palmada en el trasero. ¿Qué harías en una situación como esta?

No puedes confiar en llamar a la policía porque él no se quedará esperando a que lleguen. Podrías decidir ignorarlo por completo, pero perderías el respeto de tu mujer y por ti mismo. Nadie debería poder poner sus manos sobre las personas que amas e irse sin consecuencias.

Uno de tus deberes como hombre es proteger a tu gente. Ignorando una situación como esta has sacrificado tu propio honor y has renunciado a tu papel de protector. Escucha atentamente, nunca comiences una pelea que puedas evitar, pero es posible que te encuentres en alguna situación en la que no tengas más remedio que defenderte. Además, así estarás siempre más seguro de ti mismo, pues sabrás que en cualquier discusión, si las cosas se ponen feas, podrás defenderte. Repito, no se trata de ser un bravucón e ir buscando pelea, sino de tener la certeza de que si en cualquier ocasión necesitas defenderte a ti o a tus seres queridos, podrás hacerlo. Aprende a pelear y emplea la fuerza solo cuando sea necesario hace parte de las cosas que todo hombre debe saber.

2. Capacidad de Disipar el Conflicto

Esta habilidad está directamente relacionada con saber pelear. Independientemente de cuán fuerte o magistral seas en el arte de la lucha, siempre debes probar antes con la diplomacia y la persuasión para calmar una situación que se intensifica. Saber cómo calmar los ánimos o disolver una pelea te convierte en un líder.

Un verdadero hombre sabe cuándo debe ponerse serio y pelear y cuándo debe ceder. Antes de cualquier pelea, casi siempre es mejor intentar dialogar. Un verdadero hombre sabe diferenciar entre aquellas luchas en las que merece la pena meterse y en las que no.

No te conviertas en el típico hombre impulsivo que a la mínima discusión se pone agresivo y empieza una pelea. En cambio, aprende a mantener la calma. Siempre intenta enfriar la situación y luego analiza si es necesario usar la fuerza. Esto convierte a un en alguien realmente poderoso, en un verdadero líder.

3. Tener una Fuerte Presencia

¿Alguna vez has notado que algunos hombres tienen una presencia fuerte? Una presencia que, cuando este hombre entra en la habitación, impone respeto incluso sin decir una palabra. No es un don mágico que tienen estos hombres, sino que en realidad es una habilidad que puedes aprender.

Esta presencia es una acumulación de muchas pequeñas cosas y hábitos. Tienes que ser un hombre fuerte con un firme apretón de manos. Mira a las personas a los ojos cuando hables con ellas. Camina con la cabeza en alto. El carisma es un comportamiento aprendido, una habilidad que se desarrolla de la misma manera que aprendemos a caminar o practicamos vocabulario cuando estudiamos un nuevo idioma.

Ahora diré que muchos tipos fingen estas cosas y nunca funcionan. Todo el mundo reconoce a un farsante, el tipo que aprieta la mano tan fuerte como puede o mira a las personas a los ojos para tratar de intimidarlas. No seas este tipo. La mejor manera de aprender estabilidad es rodearte de hombres de verdad. Mira lo que hacen, aprende de ellos. Este podría ser tu propio padre, un mentor o un amigo. Observa a las personas más carismáticas que conozcas, incluso personajes de películas y series. Analiza sus comportamientos.

4. Pensamiento Crítico Profundo

La capacidad de pensar profundamente en una gran variedad de temas te ayudará a convertirte en un mejor conversador y también te dará la facultad mental para mejorar tu calidad de vida en general y tomar mejores decisiones.

El primer paso para el pensamiento crítico es considerar más de un punto de vista. No creas todo lo que te dicen, pero tampoco creas todo lo que crees saber. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero el pensamiento crítico requiere que dejes tus propias opiniones y prejuicios al margen y abraces otra información. El hecho de que siempre hayas hecho algo de cierta manera no significa que sea la manera correcta.

Cuestiona tus oposiciones y creencias. Debes estar abierto a considerar diferentes puntos de vista y la validez de otros argumentos. Es posible que aprendas algo nuevo.

5. Ser Bueno con Tu Dinero

Posiblemente la mayor decepción de las escuelas y universidades sea la falta de educación financiera. No nos enseñan. La mayoría de las personas pasan por la vida sin tener idea de cómo tratar realmente el dinero. Tomar buenas decisiones financieras y prepararse para la libertad financiera es crucial. Nos educan para creer que tienes que tener un trabajo en el que ganes un salario, nada más que eso.

Comienza a cambiar tu mentalidad financiera. Mira el dinero como algo bueno, algo que ayuda a mejorar tu vida. Un famoso libro de finanzas que te ayudará a ver el dinero desde una perspectiva diferente es “Padre Rico, Padre Pobre” de Robert Kiyosaki. Comienza a aprender sobre el dinero lo antes posible, tu vida mejorará rápidamente.

6. Aprender a Manejar el Estrés

El hombre que entra en pánico y se derrumba bajo la presión nunca superará al hombre que es capaz de permanecer tranquilo y pensar racionalmente durante los tiempos difíciles. El estrés juega un gran papel en la vida de todos. Como hombre, tendrás muchas responsabilidades en la vida y eso puede volverse estresante.

Medita y tómate momentos en tu día a día para respirar profundamente. Mantén una actitud calmada en todos los aspectos de tu vida y desarrolla estas habilidades masculinas.

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